I’ll be there for you

Los que tengan buen oído y buena memoria habrán reconocido que lo de I’ll be there for you nos evoca a la mítica serie Friends de hace unos años. Y seguro que a alguna otra canción que caminó sobre la delgada línea que separa lo romántico de lo cursi.

Nosotros hemos escogido este titular porque creemos refleja bien el compromiso que tenemos como agencia con nuestros clientes. Por desgracia las vacaciones terminaron ya para la mayoría, pero nuestros clientes se han podido ir a tomar el sol con la tranquilidad de saber que Houser & Houser estaría cuidando de sus redes sociales, de sus anuncios online, de sus plantas… Perdón, de esto último no… todavía.

Y es que como agencia que nació en la era digital tenemos claro que esta rueda no puede parar en agosto solo porque los chiringuitos de playa estén a reventar. Nuestra estructura está pensada para que los clientes no se tengan que preocupar de nada, y en ese nada incluimos que haya alguien al otro lado siempre que se necesite.

La entrega del “testigo vacacional” ha de hacerse de forma perfecta.

 

Esto supone una dosis extra de organización para que también nosotros podamos hacer vacaciones. Como si fuéramos hormigas, almacenamos contenido atemporal durante las semanas previas para que haya excedente en agosto en caso que necesitemos tirar de reservas. Y los relevos entre empleados se dan de forma perfecta, como cuando el corredor de 4×100 entrega el testigo a su compañero: los que se quedan saben perfectamente las tareas que tendrán que hacer para que la ausencia del compañero quede desapercibida.

Hemos convertido la amenaza de no tener el agosto libre en la oportunidad de no detener los motores mientras se aprovecha para cerrar temas pendientes, sin olvidar el placer de descansar cuando ya no hay rastro del turismo.

Ignacio, socio de Houser & Houser

En definitiva, no colgamos el clásico cartel de “Del 1 al 31 de Agosto cerrado por vacaciones” pero a cambio algunos trabajadores de H&H pueden hacer una escapada cuando en los chiringuitos ya no suena el Despacito y lo único que se escucha son las olas del mar. Que romántico. ¿O cursi?

En cualquier caso, si quieres desconectar de verdad en vacaciones, llámanosWe’ll be there for you.